Ya
es viernes. Eso anima a mucha gente, aunque realmente a mí me da igual, lo
único, que me voy a recoger a Clarita y eso es una alegría.
A
lo que vamos. Por ahí fuera, el maúro sigue vociferando aunque la cosa le puede
ir mal. Me da pena el opositor, porque como gane es hombre muerto, allí no le
van a consentir que destape el lio ni que le quite el pulmón de oxigeno a los
hermanos Castro.
Una
noticia vergonzosa es esa que dice que la policía de Dubái va a patrullar en Lamborghini.
Este tipo de cosas atentan contra la moral. Ser rico no es malo, pero alardear
demasiado de ello es una vergüenza, especialmente cuando su única razón de
serlo es por lo que hay enterrado bajo ellos. Es una de las cosas que me hacen
pensar que tiene que haber un más allá, donde las cosas estén mejor organizadas
que aquí.
Aquí
ya está dando sus frutos el despiporre de la Junta. En toda España ya se están poniendo
las pilas para “ocupar” lo que haga falta sin necesidad de pagar nada o de
hacer ningún esfuerzo. En su desvarío, del que por cierto no explica que es lo
que va a pasar dentro de tres años, dice que va a inhabilitar a las promotoras con
pisos desocupados. Es decir, van a multar a los que no tienen narices de vender
un pimiento.
Ya
en Málaga, junto al PTA han ocupado pisos, y esto va a ir a más.
Siguiendo
por Aquí, hay funcionarios de Marbella que se quejan de que reciben descargas eléctricas.
¿Tendrá esto algo que ver con los pis de los perros de Aznar? Quizás es una
forma de mobbing para que pidan la cuenta.
En
la capital, entre tanta morralla, una noticia buena. Hay profesores de la UMA
que se han sumado a defender la enseñanza del Latín y el Griego. Es bueno.
Aunque a los jóvenes les parezca que es una chorrada, vale para mucho más de lo
que se creen. Vale incluso para ir a los concursos de la tele y por afinidad filológica
con las raíces de lo preguntado, sacar muchas respuestas ganadoras. Eso es solo
un botón de muestra… de los de a ras de tierra.
Y
para terminar, el parte de guerra de hoy sobre los bunkercitos chirínguiteros de
la Malagueta. Tras las peleas entre concejales luxury, y las elegiacas
manifestaciones de su arquitecto, llegó el señor Alcalde y, seguramente imbuido
del aspecto militar de los inventos, habló de enmascararlos con flores y ramajes,
es decir, eso que en la mili se llamaba escaquearlos. Muy bueno, es la solución
de no limpiar las basuras, solo meterlas bajo las alfombras, que no se vean. Pero,
¡ay!, a algunos les abrió los ojitos, y ya han aparecido con flores y buganvilias…
pintadas. Van a ser el paraíso de los grafiteros, que por esta vez, van a tener
a la ciudadanía de su parte.
De
todas maneras, en esta país, ya cada uno hace lo que le sale del mingo, qué más
da…
Me
voy. Por cierto, mañana seré “oficialmente” viejo. Todo llega.
Hasta
mañana
Pepeprado
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