Voy a tener que reconocer que eso de mirar los records de algunas cosas se está poniendo de actualidad.
Ahora los yanquis han vuelto a batir varios records con lo del enturbantado cadáver. Para empezar ellos solos, sin ayuda de nadie tiraron uno de sus propios helicópteros, pero es que además, desde que han vuelto, no hacen más que echarse tierra encima. Las declaraciones y contradeclaraciones de los miembros del Gobierno están dándoles gasolina a los incendiarios del güenismo. Ya están saliendo las voces que dicen que habría que haberle dado una pensión al asesino y haberle pedido permiso al cómplice Pakistaní para entrar a preguntar si le venía bien ser detenido ese día u otro más a su conveniencia.
Todo eso de las buenas maneras y las declaraciones de bondad ultramontanas son cosas que están muy bien, pero los binladistas nunca han pedido permiso para poner bombas y matar gente. Claro que aquí el problema estriba en la comparación. Ayer mismo en el mismo informativo de televisión nos decían que a un futbolero tempranamente famosillo le pedían cuatro añitos de prisión por haber atropellado y matado a un niño, y haber dejado heridos a cuatro o cinco más, conduciendo borracho y a toda velocidad, y en cambio a un pequeño empresario por haber copiado (según Nintendo) unas claves para algunos juegos que vendía… 24 años y 800.000 euros de multa. Está claro que con este tipo de justicia que tiene esta forma de valorar, aquí a Bin Laden lo habríamos hecho Consejero de la Junta de Andalucía con despacho y coche oficial, (¡ah! Y a sus niños los habríamos colocado también).
Bate sus propios records el Gobierno, el presuntamente nuestro. Cada vez se les ve el plumero más pronto. Todavía no se ha reunido el TC y ellos ya le estaban prometiendo al PNV que la cosa va a salir a su gusto. ¿Por qué será?


Dejo, esto, pongo fotos de los bailones y me voy.
Hasta mañana.
Pepeprado
N.B.- No tengo ni idea de por qué el ordenata se niega hoy a enderezar dos de las fotos. Juro que lo he intentado tres veces.
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