Eso de los ninis

Ahora, los místicos/as del lugar se están llevando las manos a la cabeza por lo que ha salido; somos record mundial en ninis. Como es natural, todos saben a quién echarle la culpa, todos saben el porqué, todos saben que la culpa es de fulanito o de perenganito. Pero, ¡ay!, nadie se pone la manita en el corazón y asume que algo de culpa puede tener.

La eclosión de ninis, y especialmente de esa derivación patria, la de los nininis, es decir, ni estudian ni trabajan ni tienen vergüenza (están encantados de no dar un palo al agua y vivir por la jeró), es culpa de la sociedad y la sociedad, somos todos, desde los ineptos legisladores que han planeado leyes para ganar votos y nunca buscando el bien del país, hasta los imbéciles de a pie que han aplaudido “todas” esas medidas como ejemplo de modernidad, sin pararse a analizarlas una a una.

Es el resultado de haber aplaudido a jueces que han metido en la cárcel a padres por regañarle a sus niños, u obligarlos a mantener a su cargo a algunos desvergonzados que nunca han tenido trabajo porque siempre le han huido a este y nunca lo han buscado. O los papás que escogen que se les de a los nenes PCs para que jueguen ellos, sus padres, en los coles, y pasan olímpicamente de los apuros de los profesores ante las faltas de respeto de sus retoños, cuando no son ellos mismos los que atacan a los profesores a la mínima reconvención que le hagan a delfines.

Véase como ejemplo de esto, a los extremos que se está llegando; “No llevan a clase a sus hijos por la actitud de un padre con una maestra en Vélez”. Esto habla de “un solo papá”, que está haciéndole la puñeta a todo el colegio en general y al curso de su niño en particular. Es un caso extremo, pero no un caso raro, pasa mucho. Los que confunden educación con caprichos deberían pensar que por ejemplo, en México, en Guanajuato, el gobierno lo que ha suministrado como transporte escolar, han sido 26 burros (de los de verdad, de los de cuatro patas), y a pesar de esto, siguen teniendo menos burros que nosotros y están mejor en el escalafón.

Por lo demás, siguen encontrando dineros escondijos al sr. Urdangarin, que está demostrando una gran habilidad y entusiasmo en esto de encontrar paraísos fiscales.

En Málaga para que la cosa siga de infantes, un papá de 30 años, le atizó algunos mamporros e incluso le mordió, a su niña de siete años en plena calle Larios. Lo han detenido (momentáneamente) pero habría que investigar de verdad todo lo que hay en esto, porque la niña se auto culpaba, lo que puede ser dos cosas; que esta reconociera que había conseguido sacarlo de quicio, o… que el papá, además, le tiene  el coco lavado a base de amenazas y presiones.  Al final meterán en el talego al que llamó a los guardias y se acabará con el asunto.

No hay problema; en Rusia han encontrado células madre de mamut en buen estado, así que se pueden clonar mamuts, que es una cosa que nos está haciendo una falta bárbara. No sé cómo podemos vivir sin mamuts.

Hasta mañana.

Pepeprado