Es una pena, ya no están con nosotros ni don José Luis García
Berlanga ni su alter ego don Rafael Azcona, que han sido los casi únicos, que
nos han retratado a la sociedad española sin ningún tipo de cortapisa ni color
partidario. La gran pena, es que no van a poder retratar este desastre de país
en que hemos convertido lo que antes era una entidad nacional. Si ellos
estuvieran, tendrían la continuación apropiada a su “Todos a la cárcel”, con
las cosas que pasan cada día. No nos engañemos, cuando ese infame Sánchez
Gordillo sigue por ahí “incautando” fincas y haciendo paellas con el arroz “requisado”
sin que nadie haga nada, no es un hecho ni aislado ni casual. Aquí, en la misma
Málaga, hace ya años que tenemos ocupaciones aceptadas e incluso financiadas.
La llamada Casa Invisible fue ocupada y que yo sepa no paga ni agua, ni luz ni
IBI, todo eso corre a cargo del ayuntamiento, es decir a cargo nuestro, de los
contribuyentes. También los Baños del Carmen, cuya “liberación” fue una de las
primeras medidas urgentes de la democracia, siguen en manos de facinerosos y
desalmados, sin que el pueblo real, el currante, pueda disfrutar de darse un
baño en ellos, a pesar de que fueron liberados en su nombre. Nadie hace nada, y
las actuaciones nacionales, autonómicas y municipales, serían oro puro en la pluma
de Azcona y en la cámara de Berlanga. De ellas, de sus actuaciones, o mejor aún
de sus inhibiciones se podrían sacar no una, sino una saga, de películas que dejarían
a las Escopetas Nacionales a la altura de una babucha. La impresionabilidad de
los líderes actuales, de todas las esferas de poder, es tan patente, que los atrabiliarios
marqueses, el cura trabucaire o el vendedor de porteros electrónicos, serian
santos varones de una acrisolada virtud y una honradez esplendorosa.



Pongo fotos de la niebla que se ha posado esta mañana sobre Málaga.
Aclaro que en la del Parque, al final se tendría que ver el edificio de la
Equitativa. Eso sí, el calor a lo suyo, a fastidiar.
Saludos
Pepeprado
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