Sigue la Semana Santa



Ayer no fue un mal día. Aunque hacía un frio al que no estamos acostumbrados a tener durante esta semana, al menos los cielos se comportaron y aunque estaban amenazantes se contuvieron.

Estuve con mi amigo Ramón G. acompañando a don Guada en la radio un ratito y después me dediqué a lo mío, a ver y pensar  en las cosas.

Al final, salieron todas las cofradías, y como no hubo nada demasiado fuera de lo común, me limito a poner las fotos ilustrativas. Una del Cristo de los Gitanos, con su ambiente particular y otras de mantos para mostrarlos desde mi punto de vista.

Lo que sí se está notando es la falta de gente. Entendámonos, hay gente en las calles, acompañando a sus cofradías, pero indudablemente no tanta como otros años. Por mis estudios de campo, es decir preguntando en plan basto, he sacado una conclusión, y es que ha hay una gran influencia de los palos que les han dado a los funcionarios. Tienen menos pasta y además tienen que levantarse más temprano para hacer más horas. Consecuencia; bajan menos a ver las  procesiones en vivo y se atornillan ante la tele o mejor, “las teles”. Un triunfo de los políticos, esos de las grandes miras.

Hoy el día parece que va a ser tranquilo, o al menos eso espero, pero encima, hay futbol, contra los primos de Asterix. Me da la impresión de que la cosa va a estar solitaria, espero equivocarme.

De las noticias, siguen los líos, y la que lo está mostrando es la señora o señorita Colau, que se está trabajando el coche oficial y el cargo remunerado, sin pararse a pensar que sus métodos se parecen mucho, demasiado, a los de las huestes de don Adolfo, el de aquí no, el alemán de los años 30. Por Dios que no terminemos igual.

Hasta mañana

Pepeprado