Micro costas

En estos tiempos de miniaturización, esto era de esperar, especialmente teniendo en cuenta que la medida afectará a “gente importante”; la nueva Ley de Costas deja la franja litoral bajo mínimos, en vez de franja, una rayita costera. En Málaga por ejemplo, si unimos esto a las trabas a los automóviles, va a ser más fácil moverse en barca desde el centro hasta los apartamentos de playa, ya que se podrá aparcar la barca a la puerta de casa… algunos.

Para los que buscan trabajo; ha quedado una vacante en Qatar. No van a contratar al yernísimo, así que se puede optar a esa vacante, ¿o no?

Ya han salido las cifras de las manifas de ayer. Como es natural cada cual vio una peli distinta y los números no cuadran ni a martillazos. Aquí, la manifa de estudiantes y similares fue la de por la mañana, pero ya por la tarde llegó la “oficial”, esa en la que van siempre los mismos, con las mismas consignas, la bandera republicana que lo mismo les sirve para un roto que para un descosido, etc... es decir, la de los profesionales de manifestación y pancarta; “El día de huelga en Málaga por la enseñanza se cierra con miles de personas en la calle”. Más de lo mismo.

Si es novedoso un fulanito al que han detenido en Vélez. El tío ha inventado un timo nuevo; primero vendía su coche a alguien, se lo cobraba, después se lo robaba y como aún tenía los papeles, se lo volvía a vender a otro. Tiene que ser un genio de las ventas y también tener una cara de hormigón, pero al menos ha sido creativo, ha unido  su timo al del tocomocho, el nazareno, etc... Es un emprendedor de los de ahora.

El ayuntamiento ha resuelto su problema moviendo a todos de acá para allá. Los mismos pero con distintos collares, pero de eliminar sueldos, nada de nada. España cañí.

Para el final; se nos ha muerto don Alfredo (el bueno), el que nos hizo reír, y llorar para nuestro consuelo. Era un tío grande, pero como no iba a manifestaciones ni a protestas, algunos no lo miraban bien. Para la gente de la calle, uno de los más grandes, con su carrera hecha a golpe de currelo y cambiando de cara en cada película, no como otros que siempre hacen el mismo papel, el de ellos mismos. Descanse en paz, don Alfredo, seguiré viendo sus películas, ahora con una cierta añoranza, de cuando los actores se dedicaban a hacer cine.

Es viernes, toca Clarita.

Hasta mañana

Pepeprado