El G30

Ya lo del G8 va por el G30, y don José Luis sigue sin estar invitado. Mecachis. No hay que desesperar, cuando lleguemos al G197, vamos. Seguro. Vamos los dos, porque hay que recordar, que ya cuando los ocho, cuando el señor Rodríguez creía que él iba a ir a partir la pana, se tenía que (así en imperativo) invitar a alguien del mundo árabe para que decidiera sobre la crisis. Estupendo, ya no van ni el invitado ni el invitador.

En vista de que no vamos a ningún lado, veamos lo que hay por aquí. Encontramos cosas de esas que te ponen sobre aviso sobre lo loco que está este mundo. Mientras, nuestro Código Venial penaliza solo con unos meses a los quemadores de mendigos, y no sabe que hacer con un sobresaltado papá de criatura, que cuando un coleguilla del cole le pego a su nene, él, en un arranque de comprensión y de solidaridad se fue al cole y le atizó al agresor en la cabeza con martillo. Pero estas cosas no han entretenido lo bastante a nuestros emanadores de justicia; un juez de Pontevedra ha condenado a 1000 euruelos de multa y seis meses de cárcel a un peligrosísimo delincuente que… crackeó un programa informático. Si señor, estas cosas son las que hay que perseguir, que no se vaya a enfadar la SGAE que después vienen las campañas electorales y pasa lo que pasa.

Habría venido bien, que la recaudación del canon a las fotocopiadoras, lo hubieran repartido con el INEM, que ya lleva un retraso de tres meses para pagar, pero claro, estos, los parados, no cantan ni hacen películas y actos solidarias. Curiosamente, cuando sale esta noticia de unas colas interminables el paro y unas perspectivas cavernosas, te publican también que nos hace falta un chorro interminable de inmigrantes para sacar al país adelante. Explican, que son necesarios porque necesitamos “personal cualificado”. La gran pregunta; todo el tiempo y el dinero que ha gastado el país, con la inestimable colaboración de los amables sindicatos, a los planes de formación, de capacitación y de leches en vinagre, ¿en qué se han empleado realmente? Son además los mismos sindicatos que ayer protestaban airados por los planes de adaptación al programa de Bolonia de nuestra universidad y una de las "reivindicaciones" era que las pruebas de acceso "iban a ser muy duras". Mejor, sigamos con las academias en las que solamente dando pasta re regalan el título, así los únicos que ganarán serán los fabricantes de alcayatas para colgarlos (a los títulos). Yo no se si lo de Bolonia es la panacea, pero lo que sí que sé, es que actualmente los que salen con el equivalente al antiguo bachillerato salen bastante peor preparados que en aquellos tiempos. El parto de todos esos planes, esos libros con colorines de un solo uso, ese intercambio de nombres corrientes por términos pseudo científicos (patio, no, espacio lúdico) parece que esta dando a luz a una generación de JASMPP, (Jóvenes Aunque Sobradamente Muy Poco Preparados) que parecen entender solo de comer por la cara, sexo y diversión, en una emulación gubernamental (ojo, de TODOS los gobiernos, no solo de éste, aunque éste, en este tema saque medalla de honor) de algo que siempre se le ha criticado al antiguo Imperio Romano, el panen et circensis. Pero en esto pasa como con el fútbol; el Madrid iba ganando todos sus partidos, pero todos los entendidos exigían que jugara Raúl. Ahora pierden los partidos, pero están contentos. Alguien lo entenderá, yo no.

Para terminar, una contraposición de criterios, de ahora mismo. En la India, que no están como para tirar cohetes, los van a tirar. Su población la palma a mansalva, la pobreza extrema está en la calle, los pobres se mueren en las esquinas, pero... tienen la bomba atómica y ahora quieren ir a la Luna. Estupendo.

En Málaga por el contrario, estamos más pegados al terreno. Aprovechando, y antes de que mrs. Beckham llegue a Milán, nos hemos traído su gran invento, “La Pipalera”. Aquí nuestra gran preocupación son...las pipas. ¡Y todavía hay quien pone en duda que "Spain is different"! Pues, eso; Toma del frasco Carrasco.

Hasta mañana.

Pepeprado (C.H. Mañana del 23)