Una viña sin amo

Cada vez que le presto un mínimo de atención a las cosas que se dicen y escriben, me da la impresión de que estoy viviendo en una inacabable e insondable viña sin amo donde cada cual, hace de su capa un sayo.

Ayer, me dijeron en los telediarios que hay un pueblo de Cádiz donde no se ponen el casco porque no les sale de los cataplines. No pasa nada.

Me entero de que han ligado a una panda de sinvergüenzas integrales que disfrutaban con guarrerías con niños, pero en voz bajita me aclaran, que a los más peores (como se dice por aquí), como mucho, en el peor de los casos para ellos, les pueden caer unos ocho añitos de pena base, que después con las rebajas se les quedan en dos semanas mal contadas, pero… que no se pueden publicar sus caritas ni sus nombres para proteger sus intimidades. No pasa nada.

Se dice, que los líderes de los grandes partidos se van a reunir, pero que es solo para tomar un café, porque ya los dos partidos adelantan que no piensen escucharse mutuamente. No pasa nada.

El castigado señor De Juana sigue por ahí perdido; el abogado de las múltiples causas, tres cuartos de lo mismo; del concejal “extraviado” de Marbella ya hace años, ni se habla. No pasa nada.

Los borricos que van a los campos de fútbol a empezar nuevas guerras mundiales, salen con una multa (que es seguro que no van a pagar, o que es hasta posible que se las pague algún presidente de club) y unos añitos “sin ir al futbol” (y yo voy, y me lo creo). No pasa nada.

En Barcelona pierden una maleta con material radioactivo, pero como los chorizos que se la llevaron prestada la han abandonado, todos contentos. No pasa nada.

El ministro señor Alonso, al que se le supone seriedad, larga la siguiente frase refiriéndose a la elección de jueces para el TC; “personas con imparcialidad y con apariencia e imparcialidad”, y se queda tan tranquilo. Lo de la “apariencia”, precioso. No pasa nada.

Esto es literal, lo copio directamente; “El paro vuelve a subir y alcanza su mayor cifra desde 1997”. No pasa nada.

Sale esta noticia; “La venta de coches sigue en picado y cae a los niveles de hace una década”, con ella y amparándose en estos números, los constructores de coches lloran a moco tendido por todos los foros y medios, pero en un alarde de coherencia frente al ciudadano que no llega a fin de mes, a bombo y platillo, les regalan coches a las mega estrellas del fútbol, por si ellos no tienen dinerillos para comprarlos con sus sueldos. Eso sí, al currante que no paga una letra de la furgona, se la embargan ipso facto. No pasa nada.

Tras “las croquetas de mi Puri” del Ministerio de Economía, que desencadenó las iras de la súper ministra, ahora la Junta de Andalucía saca una campaña, en la que para promocionar el Guadalquivir se pone una imagen de la catedral de Palma de Mallorca, que le viene al pelo. Estas cosillas no pasarían si los encargos en vez de darlos a los “amiguetes”, se les encargaran estas cosas a profesionales independientes y responsables. Pero no importa, se retiran las campañas y todos contentos. El detalle de saber cual va a ser el pagano de los trastos rotos no hay porqué explicarlo, la gente de a píe, no tiene porqué saberlo todo, ¡leches! No pasa nada.

El presidente señor Rodríguez se va a Rusia y se le calienta la boquita delante de los micrófonos y mete la pata (otra vez). No pasa nada.

Efectivamente, una viña sin amo.

Para que la cosa quede más cercana, aquí también vamos a nuestra propia viña; “El enredo de las plusvalías / El debate sobre el proyecto para el 'nuevo Carlos Haya' ha derivado en una guerra de cifras entre el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía que resulta difícil de entender para los ciudadanos.” Algo sí es cierto en la noticia, los ciudadanos no entienden “ni papa”. No pasa nada.

Por eso, y ya que llevo unos días en que no montan nada en mi plaza (aparte de manifestaciones, protestas, campañas, etc..), me voy a cuidar mi viña. Hasta mañana.

Pepeprado