De vuelta

Se acabó el viaje. Ya estoy en casa, con mi ordenador gordo, con un teclado grandote y con teclas hermosas que admiten mis dedos sin  problemas y a las que distingo perfectamente. Se acabó pues, el imperio tabletero por un tiempo.

Ahora queda mirar si las cosas que publiqué han salido bien y dedicar una o dos tardes a organizar fotos e ideas.

Al llegar me he encontrado con una noticia gastronómico gilipollesca; van a abrir en Madrid un restaurante “Japoitaliano”. Es decir, van a xoder las pizzas y el pescado crudo. Buscan matar dos pájaros  de un tiro, aunque el tiro se lo debían dar ellos. No sé hasta dónde vamos a llegar con estas chorradas. Con la comida no se debe jugar, especialmente cuando en el mundo hay tanta gente que pasa hambre.

Bien, a lo nuestro. Lo de la corrupción sigue viento en popa, pero sobre nuestros corruptos de cabecera, hay otros que son unos verdaderos artistas… los de la FIFA. Estos, además, juegan con ventaja, porque ellos se lo guisan y ellos se lo comen, sin parlamentos ni leches. Todo el país que quiera algo, ya sabe; tiene que pasar por caja y punto. Cómo son unos cachondos, tienen incluso una “comisión de la ética”. Me reitero, unos artistas.

Por aquí, me encuentro que la Policía Nacional quiere saber de dónde salió ese extraño censo que sirvió para comprarle el ramito de violetas a don Arturo, y que Podemos quiere… “una ley sindical de tiempos de Franco”. No, si al final estos resucitan el Sindicato Vertical y lo venden como una gran novedad.

Lo que sí ha salido, es un escollo. El señor Monago, el visitador, ha presentado las facturas de sus viajes a Canarias; 16, pagados por el Senado eran para trabajar, otros 22, eran para trabajársela, por tanto privados y se los pagó él. Ahora, a ver cómo le ponemos al niño. Porque si un ciudadano se quiere pegar un festival con una esplendorosa dama, y “se lo paga él”, por mí vale. Esperemos a ver cuantos se la envainan.

En los alrededores de la Cortijá, ya se están empezando a mover los hilos para sacar el carnet de víctimas y subir al paraíso de los mártires a los señores Chaves y Griñán. Esta mañana en todas las emisoras que he escuchado, estaban dando vaselina a ambos y presentándolos como unos pobres desgraciados a los que doña Mercedes (cómo se decía antes) “les tiene hincha”. Naturalmente, del rey Gaspar no habla nadie, es peligroso.

Para salvar los muebles, doña Susana y don Pedro dicen que a los que sean malos se les expulsará, pero que estos dos son unas excelentes criaturas. Todo previsto.

Los Cortijeros sí que han dicho, que referente a Málaga, sí que van a opinar sobre “sobre la validez de la venta del balneario”. Esto es probable, porque cómo los implicados no son “de los suyos”, les resultará fácil empapelarlos.

Ya en Málaga, algo muy normal; una huelga de taxis. Por cierto, en todas las ciudades que visito, los taxis son más baratos e incluso a veces, más amables.

Para terminar de volver locos al personal, la plataforma Ganemos, que yo, personalmente no tengo ni idea de qué es, se va a partir en dos. Todo esto son ya movimientos con vistas a “colocarse” con opción a coche oficial municipal, que en esta ciudad lleva aparejado poder circular por donde quieran, no como los ciudadanos “normales”.

Hay también un envite en asuntos cofradieros; “La Expiración, la primera del Miércoles Santo”. Ahora todos a discutir.

Me voy, pero un recuerdo de hace 25 años, cuando la gran inundación. Yo, la empecé siendo atracado en una sucursal del Hispano. Todo un recuerdo imborrable.

Hasta mañana

Pepeprado