Nueva entrada

miércoles, 3 de julio de 2013

De chiste

Con la que está cayendo, el último invento de don Evo es un chiste de mal gusto. Este  ciudadano dice que está secuestrado en Viena, que es un sitio de esos que no se meten en nada ya que están escarmentados de muchas cosas.
El chivato yanqui ha levantado la liebre y abierto las lenguaraces mentes de los llamados “líderes de la democracia” sudamericana. Están protestando de falta de libertad los venezolanos, los ecuatorianos y  demás espejos de la libertad. Cuando este berenjena consiga llegar a alguno de estos paraísos de la libertad de prensa, es cuando se va a enterar de lo que vale un peine. Al principio, como es natural, lo van a agasajar y a colocar en el pedestal de la heroicidad, pero cuando intente pensar por sí mismo ya le contaran las verdades del barquero. Entonces echará en falta, como ET, suu caasa…
En estos lares, todo está dominado por el asunto Maleni. Para empezar esta ya ha sacado la lengua a pasear y ha dicho que esto es cosa de la derecha que quiere sacarla a ella en los papeles. Angelito. Cuando empiece a dar comunicados en directo, es cuando, con su proverbial facilidad de verbo, nos vamos a reír un rato. Lo único que espero es que los media sean misericordiosos e intenten olvidar que esta criatura es de Málaga, porque si no, todos vamos a salir escaldados, ya que por ahí fuera van a pensar que todos somos tan pintorescos como esta o como doña Ssselia. Por favor, caridad.
En Madrid, ha palmado un señor juez de un infarto en su juzgado, sin que nadie le ayudara. Ahora se ha descubierto que si te da un patatús en un juzgado, la palmas seguro, porque no hay nada para arreglarlo. Pobre señor juez. Sólo por curiosidad me gustaría saber qué asunto estaba juzgando para medir el riesgo que hay en ciertos temas.
En estas tierras, la Junta ha aflojado pasta inmediata, 680.000 euros del ala, para arreglar el asunto de la Cónsula. Está muy bien, pero me queda la duda de si habrían pagado tan rápido si no fuera para un asunto de cocinas y cocineros. Ahora a los que han abandonado la tortilla de patatas, se les considera futuros premios Nobel, cosa que no pasa con los físicos termonucleares ni con los doctores en química aplicada a sistemas agropecuarios de tercera generación. Hemos conseguido que los cocinillas sean los abanderados del progreso, mientras nuestros doctores y licenciados se van al cortijo de doña Anguelita a buscarse las habichuelas. A la larga lo pagaremos, habrá cocineros exquisitos, pero no habrá pasta para ir a comer.
Me voy, pero con un par de noticias positivas en Málaga.
Para empezar ha bajado el número de desempleados. Como es natural, esto es matizable, pero es indudable que es intrínsecamente bueno, aunque como también es natural, los sindicatos pesebreros le buscaran las vueltas para intentar conseguir convencernos de que lo mejor de lo mejor son los EREs en los que ellos meten la cuchara.
La otra noticia buena, es qué ¡por fin!, ha empezado la restauración de la Iglesia del santo Cristo. Más vale tarde que nunca.
Hasta mañana.
Pepeprado

No hay comentarios:

Publicar un comentario