Antes de hablar del fenómeno, la mirada casi distraída a
las noticias. Mientras el matarife de Toulouse sigue encerrado (aunque la policía
dice que es posible que ya esté fiambre), se siguen viendo noticias de esas que
te dan calor y frío (a las 11.44 HL confirman que ha palmado en un
enfrentamiento).
Todos los periódicos están volcados con la intención de
Telefónica de fichar al marido de la Pequeña Dama de Hierro local. No sé si el
fichaje es merecido o no, pero desde luego son sospechosas las ganas que le
entran a algunas empresas por fichar a gente cercana al mando. Más importante
es la noticia de que España ha perdido un 30% de su producción de huevos, y lo
más curioso es que esto ha sido debido a la búsqueda del bienestar animal. Algo
nuevo he aprendido; el bienestar y los huevos están conectados.
Lo que no ha hecho falta aprender es que Donmanué ha hecho
de su capa un sayo, ahora ya hay un alto policía quien afirma “por escrito” que
lo cesaron por tratar de investigar al retoño del amo, cosa por cierto decidida
en una consigna de todos conocida.
Bien, como esto, está visto que es lo de siempre, paso a
recapacitar sobre el asunto del título; las biografías.
Tenía entendido que cuando se emprendía la tarea de
escribir la biografía de una persona, era porque esta, ya había desarrollado
una larga y fructífera carrera, entendiendo lo de fructífera en su más amplio
sentido. Es decir y usando un par de ejemplos, desde alguien que hubiera
ejecutado una respetable labor artística, o que hubiera asesinado a una
cantidad importante de ciudadanos. Es decir entiendo que haya interés en saber
la vida y milagros desde Leonardo hasta de Jack el Destripador, si llegara a
conocerse quién realmente fue.
Ahora no, ahora, cualquier mindundi publica su biografía
para dar a conocer sus méritos. Ya hace tiempo (años) Raúl, el pelotero que
siempre quedaba bien pero España perdía, escribió, o eso decía él, la suya cuando
tenía veintipocos años, y en la presentación reconoció sin rubor, que nunca
había leído un libro.
Ahora, ya salen biografías como churros. La última ha sido
la del torero Joselito. Estoy seguro será interesante, pero que no creo que
tenga edad para dar al asunto visión histórica de su vida. Antes han publicado ¿personajes?
de apasionantes vidas, tales como Melendi, Ronaldo, Paris Hilton, Brritney
Spears, Alaska, Samuel Eto’o, Xavi Hernández, o incluso grupos como Estopa o
los Jonás Brothers. Seguro que hay gente a la que interesa la vida y milagros
de esta gente, pero me parece que aunque ellos se miren el ombligo
continuamente, su pase por este mundo no ha aportado lo bastante como para
tener que ser estudiados en un libro. Para que quede claro, tomando por ejemplo
el caso de Xavi, por su juventud, creo que le falta perspectiva histórica. Una
biografía de Kubala o Distéfano sí puede valer para entender no solo su vida,
que la tuvieron complicada, sino las circunstancias de la sociedad de su tiempo,
pero estos peloteros que todavía están en activo y cuya vida puede cambiar casi
cada día, deberían ser más cautos y menos pretenciosos. Esos otros personajes
como la Hilton o así, se la pueden ahorrar porque ya está claro que su vida
nunca va a aportar nada aunque la palmen con 100 años.
Me voy, hoy hay Foro y me tengo que preparar mentalmente.
Hasta mañana.
Pepeprado
No hay comentarios:
Publicar un comentario