Leyes y desvaríos

Esto de las leyes es para estudiarlo, pero desde fuera. Acabo de oír en la tele que le piden siete años y medio a una pianista y a sus padres, porque a una vecina le molestaban sus ensayos. Creo que es pasarse tres pueblos. Las alegaciones de la vecina de que por culpa del piano hasta perdió la movilidad de un brazo son de alucine. Pues bien, no sólo han aceptado la denuncia y están juzgando el asunto, sino que es hasta posible que dictaminen que la pianista no pueda ejercer su profesión para el resto de sus días. Increíble.

Pero, aun más increíble, es que inmediatamente después de oír esto, dicen que han pillado a un  tío que estaba en la calle tras matar a alguien y que quiso contratar por 6.000 euros a un sicario para que matara a la juez que lo había entrullado. A ver que hacen con este y cuanto le piden de condena. ¿Un fin de semana sin tele?

Dejando aparte la gran noticia de que don Arturo ha conseguido que en Israel lo reciba el portero de una tintorería y que se ha entrevistado con el moro de un bakalito al que tras comprarle siete pañuelos palestinos y cinco juegos de té (con cargo al presupuesto de la Generañitat) al que ha explicado la problemática de la invasión de Catalunya y su equivalencia con el problema de la Franja de Gaza, el resto de las noticias son casi todas, de tribunales.

Para el Supremo no se ponen de acuerdo en cómo se lo van a repartir. No se pueden reunir porque el señor Pérez tiene fiebre (el último sarpullido de su congreso), hay que esperar.

Mientras, los que aun están en el TS, estudian “si es posible seguir aplicando la doctrina Parot”. El dictamen de Bruselas no debía estar muy claro cuando todavía no han conseguido interpretarlo, pero… ya han puesto en la calle a los asesinos.

Otro juez revisa aquel informe que decía que el asesino Bolinaga se iba a morir en unos días. Este  se pasea, va de copas y vive como un marajáh mientras se ríe hasta de janeiro. Aquí también se dieron prisa.

En la Cortijá, ya se sabe cuanto era la comisión “oficial” del sindicato “de clase”; “Las mordidas de los cursos de UGT Andalucía: 'Para nosotros, el 15%'”. Por esto tampoco pasará nada, estos son intocables, “unos de los nuestros” que diría alguno de la Junta.

Ya en Málaga, lo primero que hay que hacer es felicitar a los que lo están pasando pipa; “Felipe González participa hoy en la segunda jornada de los europarlamentarios socialistas”. Se han venido aquí para entender nuestros problemas y de paso darse unos festivales al cuerpo a mesa y mantel: Eso de salvar a las patrias es muy cansado.

Tras esto, felicitarnos por un nuevo invento malacitano; el tranvimetrobus. Sacas un billete y pruebas todos los medios de comunicación en unos cientos de metros (metros geométricos y lineales, no suburbanos). Con esto, se desbloquea el asunto… por ahora. Cuando se vuelva a acabar la pasta, empezaran otra vez los líos.

Al final dos noticias pintorescas. A un fulanito que se fue de juerga, una prostituta le rajó el hermanillo chico por el asunto del pago. Moraleja, los que vayan de putas deben llevar suficiente pasta o blindar al chiquitín.

La última. El señor Obispo pone reparos a que don Pedro Moreno Brenes sea el pregonero de las hermandades de gloria. Se lo debería pensar S.I. No está el asunto como para ponerle pegas a algunos de los cristianos que aun se atreven a decirlo sin avergonzarse. También moralejeando; yo estoy con don Pedro, es buena gente y se lo merece.

Hasta mañana

Pepeprado