Garzonerías

Es maravilloso cómo le viene al Gobierno este asunto del martirologio del Juez semi-inexorable. Con esto de tener que asimilar la palma del martirio de don Baltasar, las cosas del vivir se quedan difuminadas. Eso de que ya no solo estén gastando la pasta de ayer y hoy, sino que además estén hipotecando al Estado para los próximos veinticinco años es algo como para meditarlo, no había más que ver la cara de alegría que mostraban los banqueros al firmar tamaño chollo. Pero no, de lo que hay que hablar es de las trapacerías de unos sinvergüenzas a los que lo único pertinente es aplicarles el peso de la ley y no dejarles un duro ni salir del talego hasta que no devuelvan lo que se han llevado, y de las desventuras del Justiciero casi-implacable.

Esto de los semis y los casis, quiero aclarar su porqué. Es semi inexorable porque lo es sólo con algunos dictadores, a otros, a los castros, los chinos, los chávez y demás fauna, parece no verlos. Tiene un particular prisma de observación que le desvía miradas y sus rayos de justicia. A su vez es casi implacable porque lo es solo a carta ganadora. Todo lo que sea de determinad0o color, sabe que le van a dar todo lo que pida. Siempre que no toque a los que no hay que tocar, se puede ser implacable. Naturalmente parte de la cortina de humo, para poder tachar a todo el que no esté de acuerdo con sus exigencias y poder llamarle (llamarme o llamarnos) ultras, derechona o cosas peores, consiste en decir que se lo está enjuiciando por querer investigar al franquismo, lo que no es cierto. Se le está encausando por prevaricación y por si alguien no lo ha mirado en el diccionarios, esto consiste en; “Delito que cometen los funcionarios públicos al faltar, a sabiendas o por ignorancia inexcusable, a las obligaciones y deberes de su cargo.” Es decir, para ponerlo en blanco y negro: A este señor (funcionario) el Supremo (su superior) le dijo que no le correspondía esa investigación, y él..., se pasó por los bajos la orden, porque piensa que él, está por encima de la ley del resto de los mortales. Así, que lo del franquismo vendrá después.

Mientras tanto, en Aquí, mientras tenemos que roer el hueso que nos ha echado el amigo del señor Griñán, en concepto de Deuda Histórica (esta memoria no le plugo investigar al SúperJuez), que ha rebajado el total que pedía, y vociferaba, don Manué cuando mandaba el PP, de 8.000 millones, a dar el edificio de Correos, que para más inri es un edificio enfermo. Y la Junta y el PSOE local, dicen...amén. ¡Como está mandado!

Para que la cosa esté modélica, en IU, que son dos, se comportan como en una grillera, todos chirriando y para ejemplo del personal, se pelean entre ellos. La cuestión de fondo, no es la que esgriman estos dos contendientes, que se están repartiendo una tarta que no es suya, sino la de los posibles votantes, que pueden y tienen que preguntarse, si merece la pena votar a una gente que no se pone de acuerdo ni entre los que caben en un taxi. Vuelvo a recordar aquello, de “¡Dios, que tropa!”.

Fotito de cómo está mi plaza en este preciso instante y hasta la próxima que será otro día.

Hasta mañana.

Pepeprado