De chiste

Nos hemos convertido en un país de chiste. Lo que antes era una nación grande, seria y llena de currantes, ahora es un puro chiste, aunque eso sí, en una nueva modalidad; la del chiste triste.

Díganme si no, que es eso de que el Yernísimo se está mudando de casa “por la fianza”. Es un intento de convencer a todos de que esta criatura no tiene un duro, lo que es especialmente sangrante ahora, cuando tanta gente está perdiendo su casa. Porque este ciudadano ejemplar, se muda a otro pisito en la misma deprimida zona de Pedralbes, que seguramente será de esos de VPO. ¡Vamos, anda con la pena! Que saque la pasta de donde la tenga escondida ya.

Eso sí, lo que ya sería para mondarse, si no fuera porque están jugando con nuestra tranquilidad, es el asunto catalán. Los de CiU querían que fueran dos ministros “antes” de las elecciones. Esto es para pensárselo, son los conejos disparándole a las escopetas. Quieren meter en la cárcel a los investigadores, que pienso que si están investigando será porque algunas sospechas tendrán, no están los tiempos para investigaciones chorras.

Don Arturo, que ya parece haber perdido toda la cordura, echa la culpa de todo al señor Rajoy directamente, como si este no tuviera bastantes líos como para meterse a investigador. Dice don Arturo que dimitirá si se prueba su implicación y que todas sus cuentas “corrientes” las tienen en Cataluña, aunque no habla de las que sean “poco corrientes”. Dice también, que de papá no ha recibido ni un euro, será el único hijo en España al que papá nunca le ha dado un duro.

Ya, para que el chiste sea completo, ha aparecido otro artista en este pasillo de comedia; don Antonio Tejero Molina, ex Tte. Coronel de la Guardia Civil y estrella invitada de aquel tejerazo que él se comió en su totalidad. Don Antonio ha puesto una denuncia a don Arturo en un Juzgado de Melilla por sedición y algunas cosillas más.

Aunque en principio parece que el señor Tejero algo de razón lleva, no creo que esto hiciera falta, especialmente porque puede significar que el Rey don Arturo le declare la guerra a Melilla y nosotros, los de Málaga nos convertiríamos en zona fronteriza de conflicto.

Estamos arreglados con los unos y los otros. Los dejo solos por hoy, seguro que mañana darán más que hablar, y el que mas, Mas, para seguir en la cresta de la ola.

Por aquí, en la posible zona caliente, seguimos a nuestras pequeñas rencillas. El Ayuntamiento quiere, a través de Urbanismo, que la constructora arregle los problemas del Echegaray, y mientras la oposición  reclama “responsabilidades”. Está claro, no se ponen de acuerdo ni para reclamar, a ver si se lo van pensando todos y se deciden a arrimar el ascua a la sardina de todos.

Tampoco está claro eso de la ¿Justicia? Un informe dice que los malagueños somos los que más vamos a andar de juicios en estos meses (Dios me libre a mí de semejante tragedia), pero al único que ha querido ir a la cárcel, ese empresario que atracó un banco sin llevarse el dinero, solo ara comer a cuenta de Instituciones Penitenciarias, no lo quieren ni meter en la cárcel. El pobre hombre está tieso de solemnidad y… le han puesto una multa. Pobrecillo, lo que tiene que hacer este hombre es cambiar de país.

Y el último chiste, el mejor, también de ámbito judicial; “Las tasas judiciales no se pagarán aún porque no están listos los impresos” Fantástico, se hace una norma, se organiza un lio espectacular y resulta que no la pueden aplicar porque faltan por hacer los formularios.

Como diría mi admirado Forges; ¡País S.A.!

Hasta mañana.

Pepeprado