Pensaba escribir
sobre cosillas locales del día e intentar no pensar en las tragedias de los
migrantes. De eso ya se encarga la tele y nos encoge el corazón en cada
telediario. Hablar por ejemplo de ese documento que prueba lo del 3%, o de que
dejen de salir sin control policial para sacar el carnet de conducir a una
etarra con 23 muertos a sus espaldas, o incluso de la fausta noticia de que
doña Susana volverás a la palestra “con
tiempo de participar en las elecciones catalanas”, aunque no sé si esto significa
que su poder es tan omnímodo que puede hasta votar en todas las autonomías.
Pero todo eso, queda
oscurecido por la noticia de qué el PP ha registrado una iniciativa para que el
TC pueda sancionar a esos que no le hacen ni puñetero caso.
La noticia salió
hace un par de horas, pero ya, los exquisitos de la política, por ejemplo el
señor Llamazares están en contra, porque claro, eso de que castiguen a los que
no cumplen la ley es algo muy malo y poco democrático.
A todos estos güenistas de sillón, les parece totalmente
normal que la Ley sólo sirva para la gente de a pie. Que los tipos tales como
don Más que Menos, y sus adláteres se pasen por el forro las sentencias del TC
les parece normal, o que algunos okupen (así, con k) fincas también. Otra cosa
es, si alguien de a pie corta unas hierbas en el campo, o escupe en la calle… A
esos hay que fundirlos y echarles encima todo el peso de la ley. Esa es la visión
de la democracia de algunos.
En fin, dejémoslo, esto dará mucho juego estos próximos días.
Otra cosa es la cantidad de muertos que hay en este país con el único objetivo
de divertir al personal o divertirse ellos mismos.
Hablan de lo peligroso que es fumar, o lo malo que es
tomarse dos tintos, pero si sumamos los que han palmado en los encierros veraniegos
y los que ahora han muerto preparando fuegos artificiales, se demuestra que lo
más peligroso del mundo es la vida deportiva y festivalera. Esos que se dedican
a hacer estadísticas de todo podían hacer una sobre estas cosillas.
Antes de irme, me
gustaría saber si se podría pedir compensación por daños y perjuicios por el coñazo
que nos han dado los medios de presunta comunicación con el fichaje o no fichaje
del portero maravilloso. Nos han castigado “todos los días” con los dimes y
diretes del asunto. Hemos sido bombardeados con opiniones, reportajes y demás
parafernalia sobre este, para algunos, apasionante asunto… y al final, ¡oh,
sorpresa! Meten la pata y pierden el fichaje por trámites burocráticos
presentados fuera de tiempo. Esto es para, cómo decía un amigo muy bastamente
pero muy gráficamente, “como para ponerse a mear y no echar gota”, lo que es pero
qué muy agobiante.
Siento haberme puesto
ligeramente soez, pero es que esos asuntos en los que se tiran los millones como
si fueran confeti y son tratados como si fueran temas de estado me pone de los
nervios.
Las habilidades
parta meterla (la pelota, claro) o impedirle entrar, me parecen de una importancia
muy relativa. Que se gaste tanto tiempo y dinero en ellos, mientras la gente muere
intentando huir de guerras y persecuciones, es simplemente vergonzoso, me abochorna. Mejor dejarlo.
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