Profesiones arriesgadas

Cuando se menciona esto todo quisque se pone a pensar en toreros, militares y astronautas, pero hay otras profesiones de las que vemos todos los días que también tienen su peligro.

Por ejemplo; camarero. Si alguien piensa que esto no es verdad que se lo pregunten al camarero alemán que le ha echado del tirón, cinco cervezas en el cogote a doña Angelita (Merkel). El pobre teutón se medio resbaló y vertió sobre tan vigiladas espaldas las birras que llevaba en ese momento. Cuentan que doña Angelita se lo tomó con humor, pero estoy seguro de que el autor del desaguisado no lo hizo con tanto y que el soponcio que le tuvo que entrar debió ser de los de infarto inmediato. Jura por sus germánicos ancestros que fue totalmente involuntario y que está consternado hasta las trancas, pero a ver quien convence a los servicios de seguridad de la panzerkanzler de que eso es verdad. Lo único que está a su favor es que los campos de trabajo están cerrados, precisamente porque no hay trabajo ni para los condenados. Pobre hombre, estará haciendo un consumo de valium importante. Que no sea nada.

Las profesiones son arriesgadas, pero resulta que ya, hasta las aficiones más relajantes también lo son. Por ejemplo, crucerísta de Costa cruceros, esto se ha convertido en una afición de alto riesgo. Tras el naufragio del Concordia, y el espectáculo de su alegre comandante, ahora es otro, el Costa Allegra el que se ha quedado tirado en el Índico. Anoche cuando me enteré, porque para eso tengo hilo directo con la Seychelles, adonde parece que se dirige, de que este otro barco estaba sin control en el mar, me costaba creérmelo, pero ya esta mañana saltaba la noticia cuando, afortunadamente está siendo remolcado. Menos mal, que este capitán del Allegra es menos alegre que el del Concordia, y sin necesidad de amarrarlo al puente, se ha quedado en el barco y es el que está tomando las decisiones para controlar el asunto. Es el que ha avisado que los españoles de a bordo, están bien, aunque según la tele, tienen que ser un helicóptero que lo está sobrevolando el que mantenga al barco comunicado, ya que se ha quedado sin radio ni electricidad para incluso, preparar las comidas.

Me da pena, pero después de este segundo golpe, no creo que esta naviera tenga más oportunidades de seguir, que las que pueda tener el Zaragoza de ser Campeón de Liga este año, y esto es triste, pues aunque a mí, cuando viajé en uno de ellos, no me gustó, era por apreciaciones personales, pero reconozco que el barco flotaba bien y eso de mandar más gente al paro, me duele. Suerte a todos.

Me voy, pero no me resisto a plasmar una frase magistral de hoy mismo; “Rubalcaba pide a Montoro «buscar soluciones» y no culpables”. Es muy definitoria esa falta de interés en saber quiénes son los culpables del Desaguisado Nacional por parte de este señor. Se le ve el plumero; que no los busquen no sea que los encuentren. Si él y sus correligionarios no se hubieran dedicado a gastarse  alegremente lo que no había, no necesitaríamos planes de ajuste ni vainas. ¿Por qué no te callas…?

Hasta mañana.

Pepeprado