De vacaciones

Parece que hoy, lo más gordo que pasa es que los nenes están ya de vacaciones, con las consiguientes quejas de los papas de las criaturas. Estamos de acuerdo que con la vida actual, en la que lo más probable es que los progenitores tengan que currar, les viene muy mal tener que aguantar a los rorros las veinticuatro horas del día, pero no hay que olvidar que los niños son de cada cual, los hemos fabricado y parido cada uno y una correspondiente. Querer que estén estabulados permanentemente, bien a cargo del Estado o de alguna CCAA, es algo que tenemos que dejar de lado. Por otro lado querer que los ciudadanillos estén permanentemente “en clase” es algo impensable. Su mentalidad de niños les impide estar concentrados tanto tiempo y necesitan ese intermedio.

Por lo demás el finde ha sido bueno, la Prima sigue yéndose al carajo cada día, pero le hemos ganado a Francia y con eso el orgullo patrio está a salvo. Para más nirvana mental, don Fernando Alonso partió la pana en Valencia… ¿Qué más puede querer el país? ¿Qué desaparezca el desempleo?

En la UE, uno de esos que tenemos allí cobrando un pastón permanentemente, ha soltado una bobada digna de entrar en el Libro Gili; “Almunia: 'Se diga o no se diga, el rescate se traduce en más vigilancia a España'”. Tras esto, se ha quedado descansando, ha aportado su granito de arena a la solución del problema.

En París, el de la Francia, un señor se ha tirado desde la Torre Eiffel para suicidarse. No creo que el suicidio sea una solución para nada, pero al menos a este le reconozco una gran clase. No es lo mismo tirarse desde la sexta planta de un ambulatorio que desde la Torre Eiffel. Descanse en paz.

Los que son la leche son los uruguayos. Su gobierno, primero legaliza el consumo de marihuana, después decide que en Septiembre la va a plantar en plan industrial, pero ahora suelta esta perla; “Asegura que no quiere ganar dinero con este mercado pero gravará la venta y destinará los impuestos a proyectos de rehabilitación”. Reconozcámoslo, un negocio redondo; primero los engancho, después los rehabilito y si acaso, en el proceso algo quedará para nosotros los dirigentes.

Ya por estos andurriales, una de nuestras ministras, la de Sanidad, denuncia que hay 200.000 currantes que usan tarjeta de pensionista. Esto es un (otra) de las desvergüenzas que son de dominio público. Por eso, las quejas por los recortes y las manifas me suenan tan falsas. Para protestar, primero hay que cumplir con todo, es entones cuando estamos legitimados para pedir las cuentas.

Y ya, en la Cortijá, la Junta, en el asuntillo ese de los ERES falsos, admite que “revisó expedientes”, aunque dice que ni destruyó ni altero nada. O sea, que estuvieron varios testaferros todo un fin de semana encerrados allí… sólo por curiosidad. Vale, pero la curiosidad mató al gato.

Me voy, pero como este finde he visto un par de partidos del Europeo, me voy a mojar; campeona, Italia, especialmente si su entrenador se cae del guindo y sale a jugar con once y no con diez y Ballotelli.

Hasta mañana.

Pepeprado