Las teles

Hoy ando cortito de tiempo, pero voy a aprovechar para echarle un vistazo al asunto este de las teles en el panorama ¿nacional?; “El PSOE-A rechaza que los altos cargos de RTVA cobren más que Griñán” Aquí empieza parte de ese magnifico truco consistente en colocar a familia, amigos y afiliados en sitios en los que se cobra una pasta gansa y en los que no hay que rendir cuentas de nada. Sería interesante ver los árboles genealógicos cercanos de la tribu pululante por las emisoras de televisión del país y se vería como campa a sus anchas el cariño familiar. El ente (bella palabra que lo abarca todo) andaluz, el que cae bajo el manto protector de don Manué y sus allegados, ese dedicado al arsa y olé y a hablar del Sevilla y del Betis, es lo bastante afecto a la clase dirigente, que quién no pertenece al clan de los elegidos es prácticamente invisible. Ahora con lo de los desenterramientos y los documentales de la Guerra Incivil llenan gran parte de la programación. El resto, flamenco por un tubo y ¡ale!, a vivir, que son dos días. De todas maneras, lo que sí es altamente chistoso es que el partido que reparte la pasta por aquí, haya echado la excusa de que al director ni tocarlo porqué, “el director general de RTVA no se vería afectado tanto por estar al frente de una empresa que compite en el mercado como por ser un cargo elegido por el Parlamento”. Hermosísima la llamada a la competencia pública y compaginarla con eso de pertenecer de soslayo al parlamento. Todo un alarde de creatividad.

El resto del país anda en este tema todavía más enfangado. Desde que se instauró como eficaz la moda de dar programas a los maleducados, los amantes del insulto, los reyes del despropósito, los arrastradores del lenguaje y las buenas formas, la cosa va cada vez más a peor, si esto fuera posible, qué estoy seguro que lo va a ser (Murphy dixit).

Para redondear la jugada, desde que hay que pagar el apoyo en las crisis, y ala ayuda en las elecciones, la proliferación de premios, galardones y medallas va ya camino de ser algo diario. En este programa de sustitución y readaptación de viejos lemas y propósitos considerados caducos y vergonzantes, se ha sustituido aquel tan necesario de “ni un español sin trabajo”, por este otro; “ni un solo compadre sin medalla”. En el colmo de la jeta, el señor Miguel Bosé, al que cada vez que le apetece, se le monta un festival con cargo a los presupuestos y al que vapulearon en Cuba y no dijo ni pío, se permitió largar, naturalmente aquí (y mientras le daban otro premio, porqué sí), donde según él, están algunos marginados, que era necesario dar, “amparo y leyes" para unos artistas al borde de la extinción”. Para pasmarse.

Mientras los ristos, los jorgejavieres, los folloneros, las karmeles, las anarrosas, las pestiños y similares sigan mandando en este país, la cosa no va a tener arreglo.

Claro que esto es mejor que dejar que la gente tenga tiempo para pensar en presupuestos, corrupciones, corruptelas y enchufismos. ¿Será por y para eso?

Lo jodido de este asunto, es que estas lluvias traen estos lodos; “El acoso en los colegios se inicia a los 8 años”. Es interesante (dejando aparte el alarde léxico de convertir la palabra “cabronadas” en “interacciones coercitivas”), que una de las primeras conclusiones de esta doctora en psicología es, que los mamoncillos asumen las conductas que se les muestran en las teles “cómo normales”.

En eso estamos, pero claro, mientras algunos se muestran orgullosos de haber mandado a su prole a estudiar al extranjero, lo que le impidió ahorrar, los de a pie, eso, en la trinchera. Pero venga pan y circo, que no falten partidos y tertulias.

Hasta mañana.

Pepeprado