El tiempo castiga a Málaga de forma inmisericorde. Ayer estuvo el día metido en agua y las procesiones lo pasaron como buenamente pudieron. Algunas, Dolores del Puente y Cautivo, no salieron; Pasión hizo una escapada para cumplir con sus estatutos e ir en penitencia a la Catedral, pero todo rápido y sin más paradas que las imprescindibles; otras se encomendaron a Dios y salieron, con variopinta suerte. A Crucifixión llegó hasta a encharcársele el manto de la Virgen (foto); Gitanos parece que escapó con mejor suerte y Estudiantes terminó y se encerró entre paraguas, con un ligero sirimiri que estuvo amenazante durante todo su recorrido. Veremos a ver qué pasa hoy, pero pase lo que pase, la semana está resultando preocupante, aunque frente a estas tristezas se contrapone una alegría de la gente y unas ganas de estar en la calle increíbles; está Málaga de bote en bote, vayas donde vayas. Esperemos, no queda otro remedio.
Las fotos; además de la del manto de la Señora del Mayor Dolor y de encierro paragüero de Gracia y Esperanza, el frente de promesas tras Gitanos y parte de la nutrida representación infantil de Estudiantes, la cantera de futuro de la SS.
Hasta mañana.
Pepeprado
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