Por fin don Mariano ha dicho quienes van a ser los ministros y ministras
de su gobierno. Con esto descanso, porque llevaba un par de semanas pendiente
del teléfono por si me llamaba a mí. Ayer estaban todas las emisoras dislocadas
haciendo comentarios e intentando demostrar que lo sabían antes, cosa que el
gallego ha conseguido no sea verdad. Nadie sabía de qué iba la guerra.
A mí personalmente, el gobierno este me parece serio, lo que es una novedad
después de los años de faralaes y quincalla últimos. Aquí no hay niñas del
flamenco, hijas de alguien ni donmanueles premiados por su fidelidad perruna.
Me ha gustado que el antes llamado ministerio de Trabajo lo haya cambiado por el
de Empleo, es una declaración de intenciones. Por lo demás, tiempo, y como con
las leyes, a esperar los reglamentos que son los que de verdad marcan las intenciones.
Por su parte, doña Carmela ya ha empezado con su campaña particular. Es
su forma de intentar que España sea un protectorado o colonia de Cataluña. Que
se lo piense porque el ex Gran Visir no es de fiar en estas cosas de moverle el
sillón.
Lo demás, como siempre, noticias de las de ponerte a pensar en qué
solar hemos convertido a este atribulado país. En Barcelona, cuna del seny y el
buen juicio y discernimiento, un papá algo alterado, la emprendió a puñetazos con
la profesora de su retoño. Especifico, puñetazos en plural, no es que se le
escapara un guantazo airado, sino que le propinó una paliza de las de libro. Después
se fue y denunció a la maestra porque presuntamente “pegó a su niño”, cosa que
yo, cercano a maestros, maestras y otros docentes, no me creo. A estas alturas
de la película no creo que haya un docente que se atreva a tocar un pelo a
cualquiera de esos infantitos e infantitas cargados de derechos y sin ninguna obligación.
Dar un coscorrón a uno de estos impúberes, es más peligroso que irse de camping
a Afganistán con la mochila cargada de jamón y tinto. No creo que haya ningún pedagogo
con semejante espíritu legionario. La paliza del papá, dejando claro que encima
fue ante testigos, sí es congruente con el tipo de progenitores que se estila
hoy día.
Otra noticia muy del estilo de la modernidad y el talante implantado en
la ciudadanía, viene de Guareña, Badajoz, donde un progre simpaticón, ha estado
a punto de cargarse a todos sus compañeros con una gracia muy del estilo
progresista y liberal actual, poniéndoles por delante una tarta amorosamente confeccionada
por él con marihuana. Nueve de sus colegas tuvieron que ser hospitalizados y
los demás se curaron ellos mismos. Es edificante saber que esta es la concepción
de las bromas que hay ahora. Al berenjena este, lo han echado de la empresa, claro
que ahora saldrá algún abogado laboralista con ganas de salir en la tele que
luchará como un tigre por sus derechos y algún juez comprensivo (con él y con
la marihuana) obligará a la empresa a readmitirlo y a subirlo de categoría. A
mi, que debo ser bastante retrogrado para estas cosas, me parece que aparte de
dejarlo en el paro para mucho tiempo, habría que haberle administrado unas
pocas de hostias de las de mano abierta y sin consagrar, para que se siguiera
riendo un ratito más de su gracia. Estamos en manos de este tipo de personajes
y no comprendo el porqué la Justicia no interviene de oficio contra estas
cosas. Es mejor dejarlo.
Ya ha salido el Gordo y como es natural no me ha tocado, cosa que ya esperaba.
A mí me tocó hace muchos años al casarme con mi Maru. Ya lo dije ayer, tengo
bastante.
Hasta mañana.
Pepeprado
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